¡Tu carrito está actualmente vacío!
Hace un par de años hice una colección NFT de mis muñecos, con una versión digital de mis AngryDolls. Esos pequeños muñecos con alma gruñona pero propósito noble, que nacieron para aliviar el estrés y canalizar nuestras emociones. Hoy, ese sueño toma una nueva forma: una colección limitada de 300 NFTs únicos de AngryDolls, cada uno con su propia personalidad, historia y actitud. Pero esta vez, hay un giro importante: los estoy regalando.
Una colección con propósito, no con precio
En un mundo donde los NFTs se convirtieron en sinónimo de especulación, quise ir en la dirección contraria. No por rebeldía, sino por coherencia. Los Angrydolls nacieron como una herramienta emocional, como pequeñas criaturas que te acompañan en los días caóticos. Y por eso, esta colección no está a la venta: es un regalo para quienes conecten con el espíritu del proyecto.
Cada NFT es único. Desde el diseño hasta la expresión. Algunos son dulces, otros rabiosos, otros simplemente confundidos. Pero todos tienen un corazón latiendo (aunque sea digital). Son piezas de arte, sí, pero también pequeños tótems modernos para quienes creen en la magia cotidiana.

¿Cómo conseguir uno?
Simple: entra a mi tienda online y explora la sección de AngryDolls. Ahí verás un apartado exclusivo donde puedes reclamar gratuitamente uno de los 300 NFTs. No hay sorteos, ni trampas, ni tarifas ocultas. Solo quiero que lleguen a quienes realmente los valoren.
¿Por qué hacerlo?
Porque creo que la creatividad debe ser compartida. Porque me gusta imaginar un mundo donde los objetos digitales también tienen alma. Y porque, a veces, dar algo sin esperar nada a cambio es el acto más poderoso de todos.cos que puedan aplicar en sus propias vidas. Esta es tu oportunidad de dejar una impresión duradera, así que asegúrate de que tus pensamientos finales sean impactantes y memorables. Una conclusión sólida no solo une el artículo, sino que también inspira a los lectores a involucrarse aún más.
Deja una respuesta